Sí, Miguel Ángel Russo, actual DT del Ciclón, tendrá enfrente otra vez al Matador. Y no es casualidad: su primer partido en el banco azulgrana fue justamente ante Tigre, allá por 2008, con derrota 1-0 en el Bajo Flores. Aquel torneo terminó con final de novela: triple empate en lo más alto entre San Lorenzo, Boca y el propio Tigre. Todo se definió en un triangular que todavía duele por Boedo. San Lorenzo le ganó 2-1 a Tigre en la primera fecha del mini-torneo, con goles de Silvera y un joven Bergessio que ya empezaba a picar. Pero después, el equipo de Russo cayó ante Boca y los de La Ribera terminaron levantando el título por diferencia de gol. Tigre, pese a igualar en puntos, quedó con las manos vacías. Y el Ciclón, a las puertas de la gloria. Ahora, 17 años después, Russo vuelve a cruzarse con el Matador en un mano a mano que vale oro. El equipo de Boedo se metió en los playoffs como cuarto del Grupo B, tras un cierre de fase irregular, pero con señales positivas en los últimos partidos. El propio DT tiró: "Estamos encontrando el equipo en el momento justo. Ahora empieza lo más lindo." Del otro lado, Tigre viene entonado. Con Diego Dabove como DT, clasificó tercero en el Grupo A y quiere dar el golpe. La idea es clara: presión alta, juego directo y mucho desgaste físico. Cuidado con Blas Armoa y Tomás Badaloni, dos que vienen en alza. ¿La buena para San Lorenzo? El historial reciente le sonríe: ganó cuatro de los últimos cinco partidos ante Tigre. Pero los mano a mano son otra historia. Y más cuando hay un pasaje a cuartos en juego. Russo vuelve a encontrarse con su debut. Y esta vez quiere cambiar el guion.