Un baldazo de agua fría sacudió la concentración de Boca en Miami: Ayrton Costa no podrá disputar el Mundial de Clubes. El marcador central, uno de los refuerzos que había pedido expresamente Miguel Ángel Russo para reforzar la última línea, finalmente no recibió la visa para ingresar a Estados Unidos y quedó descartado para el torneo internacional que desvela al hincha xeneize. La noticia fue confirmada por el propio club tras recibir la notificación oficial de las autoridades migratorias estadounidenses. Aunque Boca y el jugador habían presentado todos los papeles requeridos en tiempo y forma, la visa nunca fue aprobada y, con el debut a la vuelta de la esquina, no quedó otra opción que bajarlo de la lista definitiva. Una baja inesperada que altera los planes de Russo, quien ya había probado variantes defensivas pensando en Benfica y contaba con Costa como una opción concreta para pelear el puesto de central o lateral izquierdo. Ahora, el DT deberá rearmar su esquema en defensa con los nombres disponibles en la delegación. ¿Por qué no le dieron la visa? El motivo exacto no trascendió oficialmente, pero desde el entorno del jugador deslizaron que la negativa se debió a antecedentes legales en su paso por Independiente que complicaron su situación consular. Boca intentó destrabar la gestión con abogados especializados, pero no hubo caso: Costa no podrá pisar suelo norteamericano en esta ocasión. Un rompecabezas para Russo en la defensa Con esta baja, la zaga central pierde una variante importante de recambio. Cristian Lema, Nicolás Figal y Marcos Rojo asoman como las cartas fuertes en el fondo, mientras que Lautaro Di Lollo y el juvenil Aaron Anselmino completan la nómina defensiva. Además, Advíncula y Blondel regresaron tras la fecha FIFA y estarán a disposición para cubrir los laterales. Boca, entre la ilusión y los contratiempos A la incertidumbre por la lesión de Edinson Cavani, que sigue trabajando diferenciado, se suma ahora este revés con Ayrton Costa. Sin embargo, el plantel mantiene la motivación intacta para encarar el debut frente a Benfica y soñar con hacer historia en el Mundial de Clubes. La ilusión xeneize sigue viva, aunque el camino empezó a mostrar algunas piedras inesperadas.