A pocas horas del cierre del mercado de pases, Agustín Almendra volvió a agitar el ambiente rumbo a Liniers: el mediocampista se contactó con su exentrenador Guinness, Guillermo Barros Schelotto, hoy al frente de Vélez, para expresar su deseo de sumarse al Fortín. Una jugada audaz que refleja su urgencia por encontrar más minutos de juego, lejos de la suplencia que sufre en Racing, donde no fue parte del equipo el fin de semana y perdió terreno en la consideración de Gustavo Costas. Desde Avellaneda la postura es categórica: “no reforzamos rivales directos”, aseguran desde Racing, alineándose con la visión presidencial de Diego Milito, quien ya frenó gestiones anteriores . La directiva no está dispuesta a facilitar un pase interno que podría afectar la competencia. Mientras tanto, Vélez tiene el visto bueno técnico de Schelotto, que lo conoce a la perfección: fue quien lo hizo debutar en Boca. El entrenador lo considera una pieza valiosa, pero es Racing quien decide su futuro. Con el plazo apremiando, Almendra redobla esfuerzos para forzar una salida. En Racing evalúan dos caminos: retenerlo pagándole un mejor contrato que venía reclamando, o aceptar una oferta que sea rentable y lo aleje del plano local. En este escenario, la opción Vélez aparece como difícil —aunque no imposible— a menos que cambien las condiciones del mercado o se abra una salida al exterior.   Claves de esta novela Llamada inesperada: Almendra volvió a hablar con Schelotto para buscar su chance en Vélez. Resistencia académica: Racing se opone firmemente a reforzar un rival directo. Presión final: llega el cierre del libro de pases; la dirigencia deberá decidir si renueva o vende. Protagonismo mínimo: en la cancha, Costas no cuenta con él y lo dejó afuera del equipo titular.     En Zona de Gol, seguimos con atención este pulso de mercado que puede darle aire o cierre a la carrera de Almendra. Hoy todo puede definirse.   WhatsApp: https://whatsapp.com/channel/0029VbAgwh3DeONCnOA33c40 X: www.x.com/zonadegol_ok