River encara la última fecha del Grupo B de la Copa Libertadores con la tranquilidad de haber asegurado la clasificación, pero con la ambición intacta: terminar como el segundo mejor primero para cerrar todas las series eliminatorias en el Monumental. Para eso, Marcelo Gallardo no guardó nada y parará de arranque a su “once de gala” contra Universitario de Perú este martes a las 21:30 . El equipo confirmado La alineación que saltará al césped será la misma que viene puliendo la mística copera, solo obligada a un cambio tras la baja por sinovitis de Paulo Díaz. Así, el “Pulpo” Pezzella se corre al centro de la defensa y vuelve a formar junto a Lucas Martínez Quarta. Del medio hacia adelante, aparecen los nombres de siempre, auténticos dueños de este ciclo: Cuidado con las amarillas La única preocupación pasa por dos guerreros de la cancha: Franco Armani y Kevin Castaño llegan al partido con dos amonestaciones cada uno. Un solo desliz de más los dejaría fuera de la ida de octavos, una baja sensible para cualquier serie copera. Por eso, además de la obligación de ganar, Gallardo les pidió que “jueguen con cabeza”, midiendo cada cruce sin resignar carácter. La misión: rematar la fase de grupos River necesita los tres puntos para consolidarse detrás de Palmeiras y reclamar el lugar de “mejor escolta” entre todos los primeros de grupo. Esa posición le garantizará cerrar en casa octavos, cuartos y semifinales, un plus que en Núñez convierte cada pelota parada en un arma letal.   El Monumental, escenario de fortalezas El templo millonario no pierde un partido de Copa desde el 1 de marzo, cuando Estudiantes dio el golpe por el torneo local. Con la Bombonera vacía y la hinchada única en casa, el aliento volverá a ser “otro jugador” en el campo, empujando a un equipo que sabe jugar al ritmo de su público. Este martes, el tablero está servido: River sale a la cancha por más que puntos; sale por la ventaja copera y por cuidar a sus piezas clave de cara a la guerra de octavos. Porque en la Libertadores, cada detalle cuenta.